MODULO IMPARTIDO POR : JUAN ANTONIO VALDIVIESO
¿QUÉ ES EVALUAR?
Proceso básico de valoración en el
que se obtiene información sobre las necesidades y los logros del alumnado,
para formarse un juicio de calificación razonada que posibilite una posterior
toma de decisiones en la actividad educativa
Mecanismo que tenemos para reforzar, fomentar
la autoconciencia, acompañar en el aprendizaje y tomar decisiones.
Evaluar es medir constantemente para tomar
decisiones en el proceso de enseñanza-aprendizaje del alumno (conseguir el
mejor Pepito que Pepito puede ser).
No es solo poner una calificación cuantitativa
sino también cualitativa.
¿POR
QUÉ ES IMPORTANTE EVALUAR?
La ley nos dice que tenemos que hacerlo de
forma continua, global y formativa, para poder diagnosticar de la forma más
objetiva posible.
¿QUÉ
SIGNIFICADO TIENE?
Conocer las necesidades, las competencias que
tiene adquiridas y poder tomar decisiones a través de un análisis estratégico
válido y fiable.
¿EN QUÉ
MOMENTO?
Diariamente
¿CUÁLES
SON LAS FUNCIONES?
Feed-Back continuo, recibir información, tomar
decisiones y dar información al alumno para mejorar en el proceso.
MODALIDADES
O TIPOS DE EVALUACIÓN
HERRAMIENTAS
PARA RECOGER LA INFORMACIÓN:
Diana de autoevaluación
Lista de control
Exámenes
Rúbricas de actividades
RESUMEN
La ley nos dice que tenemos que evaluar por
estándares, teniendo en cuenta que tenemos más de cien estándares, con un solo
examen es imposible recoger toda esa información.
Tenemos que cambiar la metodología y la forma
de evaluar, tenemos que obtener datos todos los días de todas las actividades
que llevamos a cabo y no solo de los exámenes.
Nuestra
labor consiste en evaluar en el 90% de nuestro tiempo y no en explicar.
Para recuperar es necesario saber qué
estándares ha superado y cuáles no. No tiene que ser a través solo de un
examen, depende lo que tenga que recuperar, puede ser a través de trabajos,
exposiciones…. Los estándares básicos nos permiten tomar decisiones sobre si un
alumno supera o no el trimestre.
ANEXO MODALIDADES
O TIPOS DE EVALUACIÓN
2.1.- Según su finalidad y función
a) Función formativa: la evaluación se utiliza
preferentemente como estrategia de mejora y para ajustar sobre la marcha, los
procesos educativos de cara a conseguir las metas u objetivos previstos. Es la
más apropiada para la evaluación de procesos, aunque también es formativa la
evaluación de productos educativos, siempre que sus resultados se empleen para
la mejor de los mismos. Suele identificarse con la evaluación continua.
b)
Función sumativa: suele aplicarse más en la evaluación de productos, es decir,
de procesos terminados, con realizaciones precisas y valorables. Con la
evaluación no se pretende modificar, ajustar o mejorar el objeto de la
evaluación, sino simplemente determinar su valía, en función del empleo que se
desea hacer del mismo posteriormente.
2.2.- Según su extensión
a)
Evaluación global: se pretende abarcar todos los componentes o dimensiones del
alumnos, del centro educativo, del programa, etc. Se considera el objeto de la
evaluación de un modo holístico, como una totalidad interactuante, en la que
cualquier modificación en uno de sus componentes o dimensiones tiene
consecuencias en el resto. Con este tipo de evaluación, la comprensión de la
realidad evaluada aumenta, pero no siempre es necesaria o posible.
b) Evaluación parcial: pretende el estudio o
valoración de determinados componentes o dimensiones de un centro, de un
programa educativo, de rendimiento de un alumnos, etc. 2.3.- Según los agentes
evaluadores
a) Evaluación interna: es aquella que es
llevada a cabo y promovida por los propios integrantes de un centro, un
programa educativo, etc. A su vez, la evaluación interna ofrece diversas
alternativas de realización: autoevaluación, heteroevaluación y coevaluación. *
Autoevaluación: los evaluadores evalúan su propio trabajo (un alumno su
rendimiento, un centro o programa su propio funcionamiento, etc). Los roles de
evaluador y evaluado coinciden en las mismas personas.
* Heteroevaluación: evalúan una actividad,
objeto o producto, evaluadores distintos a las personas evaluadas (el Consejo
Escolar al Claustro de profesores, un profesor a sus alumnos, etc.)
* Coevaluación: es aquella en la que unos
sujetos o grupos se evalúan mútuamente (alumnos y profesores mutuamente, unos y
otros equipos docentes, el equipo directivo al Consejo Escolar y viceversa).
Evaluadores y evaluados intercambian su papel alternativamente.
b) Evaluación externa: se da cuando agentes no
integrantes de un centro escolar o de un programa evalúan su funcionamiento.
Suele ser el caso de la "evaluación de expertos". Estos evaluadores
pueden ser inspectores de evaluación, miembros de la Administración,
investigadores, equipos de apoyo a la escuela, etc. Estos dos tipos de
evaluación son muy necesarios y se complementan mutuamente. En el caso de la
evaluación de centro, sobre todo, se están extendiendo la figura del
"asesor externo", que permite que el propio centro o programa se
evalúe a sí mismo, pero le ofrece su asesoría técnica y cierta objetividad por
su no implicación en la vida del centro.
2.4.- Según el momento de aplicación
a) Evaluación inicial: se realiza al comienzo
del curso académico, de la implantación de un programa educativo, del
funcionamiento de una institución escolar, etc. Consiste en la recogida de
datos en la situación de partida. Es imprescindible para iniciar cualquier
cambio educativo, para decidir los objetivos que se pueden y deben conseguir y
también para valorar si al final de un proceso, los resultados son
satisfactorios o insatisfactorios.
b)
Evaluación procesual: consiste en la valoración a través de la recogida
continua y sistemática de datos, del funcionamiento de un centro, de un
programa educativo, del proceso de aprendizaje de un alumno, de la eficacia de
un profesor, etc. a lo largo del periodo de tiempo fijado para la consecución
de unas metas u objetivos. La evaluación procesual es de gran importancia
dentro de una concepción formativa de la evaluación, porque permite tomar
decisiones de mejora sobre la marcha. c) Evaluación final: consiste en la recogida
y valoración de unos datos al finalizar un periodo de tiempo previsto para la
realización de un aprendizaje, un programa, un trabajo, un curso escolar, etc.
o para la consecución de unos objetivos.
2.5.- Según el criterio de comparación
Cualquier valoración se hace siempre comparando el objeto de evaluación con un
patrón o criterio. En este sentido, se pueden distinguir dos situaciones
distintas:
a) En
caso de que la referencia sea el propio sujeto (sus capacidades e intereses,
las metas que se había propuesto alcanzar, considerando el tiempo y el esfuerzo
invertidos por el sujeto, y teniendo en cuenta sus aprendizajes previos) o
cualquier otro objeto de la evaluación en si mismo (las características de
partida de un programa, los logros educativos de un centro en el pasado, etc.),
estaremos empleando la AUTOREFERENCIA como sistema
b) En el caso de que las referencias no sean
el propio sujeto, centro, programa, etc., lo que se conoce como
HETEROREFERENCIA, nos encontramos con dos posibilidades:
b.1) Referencia o evaluación criterial:
Aquella en las que se comparan los resultados de un proceso educativo
cualquiera con los objetivos previamente fijados, o bien con unos patrones de
realización, con un conjunto de situaciones deseables y previamente establecidos.
Es el caso en el que comparamos el rendimiento del alumno con los objetivos que
debería haber alcanzado en un determinado plazo de tiempo, o los resultados de
un programa de educación compensatoria con los objetivos que éste se había
marcado, y no con los resultados de otro programa.
b.2) Referencia o evaluación normativa: El
referente de comparación es el nivel general de un grupo normativo determinado
(otros alumnos, centros, programas o profesores). Lo correcto es conjugar
siempre ambos criterio para realizar una valoración adecuada, aunque en el caso
de la evaluación de alumnos, nos parece siempre más apropiada la evaluación que
emplea la autorreferencia o la evaluación criterial. El empleo de uno u otro
tipo de evaluación dependerá siempre de los propósitos de la evaluación y de su
adecuación al objeto de nuestra evaluación.